Recuerdos de Cuaresma

Tarde de Cuaresma en Santiago

Al pasar del tiempo me he dado cuenta de como uno va apreciando que cada año tiene muchas etapas, tanto como las estaciones, el clima, etc, y con todo esto el ser humano ha creado tradiciones que van de la mano, en este caso La Cuaresma conjunto a la Semana Santa, que es una de mis favoritas por todo lo que en ella conlleva. Hace pocos años hice algunas fotografías y fue muy bueno el resultado, pero esta vez quise hacer un trabajo más exhausto, con más profundidad. El resultado esta calientito, pues ya a acabado esta Cuaresma y Semana Santa y aquí están todas listas las fotografías. 

Aunque la cuaresma es el periodo del tiempo litúrgico destinado por la iglesia, mi niñez fue influenciada de forma distinta, aprovechando la soledad que esta época brindaba a la ciudad de Santiago en los finales de los ochentas y principios de los noventas, ya que los colegios y trabajos estaban de vacaciones, habían menos vehículos y tránsito, sumándose el éxodo de la gran mayoría a las playas y hoteles. En cambio un servidor que fue criado por su bisabuela, siempre quedaba todas las semanas santas en su casa, siendo transformado por la soledad y aprendiendo a amar costumbres de esta época, por tanto que ahora preparo estas fotos para que puedan apreciar de la forma como yo sentía la cuaresma en el pasado.

Polvo del Sahara iluminado por los rayos horizontales del atardecer  sobre Las Aromas

Tonos naranjas

Cuaresma en la Catedral

EL RIO

Brilla el Yaque

Nunca pensé en el río en este tiempo, y por coincidencias de la vida me mantuve recorriendo sus zonas por motivos ajenos en un lapso de tiempo enamorándome de los tonos del sol que distintamente iluminan dicha área olvidada de Santiago. El brillo en el agua sumamente cálido y hermoso , vi los caballos de los cocheros pastar en su día libre, luego cruzar el río para tomar reposo y arriba las personas cruzando el puente sin darse cuenta de todo lo que sucede debajo de ellos por sus afanes de diario vivir.

Entre dos mundos

En busca de un descanso 

Las amapolas sobre el río

El chasqueo del Chachá 

LA CHICHIGUA

El vuelo de la chichigua 

La mayoría de los que vuelan chichiguas no disfrutan mucho del carnaval, y por eso esperan que pase dicho evento al comenzar la cuaresma, pero el vuelo de la chichigua se debe al comienzo de los vientos alisios que llegan y soplan de manera relativamente constante antes de verano y menos en invierno. Este arte, deporte o pasatiempo se hizo popular en nuestro país, acogiendo el mes de marzo e inicio de la temporada de cuaresma, como la época idónea para “el vuelo de la chichigua”, debido a los vientos favorables o brisas que son característicos en estas fechas.

A mí personalmente el vuelo de la chichigua me encanta, es un acto de relajación tanto físico como mental, pues no solo el disfrute de manejar un objeto que nos asemeja a la misma libertad de volar, este nos hace reflexionar en muchas cosas de nuestras vidas, pues porque nos damos ese tiempo personal de volver a jugar, y cuando eso pasa nuestra mente es libre. Son tantas cosas que no se pueden expresar.  

Corrigiendo

El disfrute

El vuelo

Un soñador

Típica Chichigua hecha de fundas

LA CIUDAD

Baño

la ciudad nunca se puede quedar en mis fotografías, de verdad que es mi eterna enamorada, nuestro hogar, donde nos apasiona su antiguo pasado que aún queda en su piel. Tanto como el mismo ambiente, la ciudad cambia debido a la iluminación de esa época única. Gracias a esa luz, los matices son bien recibidos por nuestros sentidos cuando ponemos caso a dicho suceso. Las maderas, los ladrillos, los zinks, el aire, el ambiente cambia "quedando grabado ese tiempo en nuestros recuerdos" así al pasar de los años cuando volvemos a ver los mismos eventos lumínicos de la época, vienen esos recuerdos nuestros como flashes llenándonos de alegría.

Aún

Como el Fénix 

Sigue el soporte

Espacios del tiempo

Escape

Donde habitas

   

Sueños del lagarto

Noche

LA TARDE

Personas disfrutan la tarde en el monumento

La tarde es lo más hermoso realmente de todo este tiempo, esos atardeceres anaranjados llenos de mamey, nos alivia los recuerdos a quienes de verdad admiramos todo esto.

Niños

Disfrute del coche

En la espera de la última venta del día

Caminantes

Que será de nosotros?

El sol en la Calle del Sol

Rumbo a casa

Pocas personas

Los tiempos han cambiado

Sus años

HABICHUELAS CON DULCE Y COSMOS

Tarde de Cosmos con habichuelas con dulce. 

Es ya una costumbre consumir las habichuelas con dulce los Miércoles de Ceniza, los viernes de Cuaresma y durante la Semana Santa. En mi caso, siempre las comía sentado en casa las tardes mientras daban por la televisión el programa Cosmos, de Carl Sagan, era algo tan extraordinario como la ciencia se colaba en la misma Semana Santa, pero era muy bueno porque durante el mismo tiempo de reflexión espiritual, también había tiempo para el conocimiento de uno mismo.

RELIGION

Domingo de Ramos 

La Cuaresma es tiempo de retiro espiritual en el que la meditación y la oración personal deben ser intensificadas para lograr la renovación espiritual que se anhela conseguir durante este tiempo.

Seguidor

Viendo Moisés, una tradición de décadas

Amarillenta y anaranjadas luces de la tarde, de fondo la Altagracia

Viernes santo

Fieles

CUANDO CAE LA TARDE

Azul naranja

Era desconocido el impacto que tiene el desierto del Sahara en el clima del caribe, el Instituto de Oceanografía, documentó que cada año las tormentas de arena para esa época en el norte de África transportan 450 millones de toneladas de polvo terrestre, de las cuales 43% ingresa al Atlántico norte y nuestra isla también queda cubierta por el denominado "Polvo del Sahara, que ponen nuestros cielos brumosos en los atardeceres a consecuencia del polvo proveniente desde el desierto de Sahara creando un espectáculo que va en los tonos desde mamey claro, hasta mamey casi rojizo.

Una tarde

Cerca del río

Puro atardecer

Se me escapa tu amor

El Sahara baña a Santiago

Volveremos algún día

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EL AUTOR

Nací en Santiago en 1978, criado por mi bisabuela en el mismo centro de la ciudad, siendo mi casa una cuna de aventuras y un lugar para la experimentación. Encontré desde bien niño a principios de los ochenta calendarios fotográficos de montañas y rompecabezas con colores desgastados. Eso bastó para que fascinarme con lugares insólitos. Empecé a amar la fotografía desde principios de los ochentas cuando su madre trajo fotografías del Pico Duarte en un viaje en 1985 hechas por Luis José Bonilla (Mi primer fotógrafo favorito). También en mi casa contemplaba horas muertas viendo fotografías de antiguos calendarios con bosques y paisajes canadienses. A finales de los ochenta sumergido en una etapa solitaria, descubrí techos de hojas de zinc, un callejón escondido y los ocasos más hermosos quedando absorto por los detalles que producen los patios, las casas antiguas y las cosas olvidadas. En la década de los noventa encontré un libro de fotografías en blanco y negro “Jueves 68” quedando fascinado con las fotos de Vitico Cabrera entre otros. En 1997 fue ese año que empecé a tomar fotografías con la vieja cámara de mi papa. En 1998 me fui a la cordillera central por primera vez en mi vida, en un viaje que había esperado 13 años para lograrlo. Al año siguiente compré mi primera cámara profesional una kodak. A principio de 2000 y 2003 fueron años esenciales de pruebas y prácticas. En el 2004 compré una Samsun digital profesional, y tome fotografías en cantidades colosales, tanto así que este fue el motivo de hacer una primera exposición. 

En el 2006 realicé mi primera exposición individual "Experimento con Matices" en donde expuse las mejores fotos de los últimos 4 años antes. En el 2008 publiqué Un libro digital de fotografías y fotos surrealistas que sería mi segundo proyecto fotográfico “Banquete Surrealista” en donde se expone un viaje a otra dimensión, donde conlleva por primera vez fotos y poemas. A finales del 2009 publiqué de la misma forma el segundo libro digital “Callejones” donde se expone los callejones olvidados de Santiago, y la magia que en ellos se conserva. Este libro posee fotos y poemas propios míos. Y en noviembre del 2011 publiqué "Lo que nadie ve" un esfuerzo fotográfico deseado toda mi vida por mi desde niño hasta nuestros días, el mas largo que he durado trabajando, solo por darle tiempo y paulatinamente corregir cada detalle. Lo comencé en el 2006. En el 2013 publiqué "Santiago en la Noche" Las fotos muestran un estilo antiguo, blanco y negro, viejas casas, todo lo antiguo que queda rondando en el centro histórico de la ciudad de Santiago, donde viví cuando niño.

Y hoy presento para todos ustedes mi más reciente trabajo "Recuerdos de cuaresma" Fotos con un sentido sentimental de unas de las mejores épocas para mí pues esta llena de muchos matices tanto como costumbres que aún se conservan en nuestros días. Cuaresma y Semana Santa, época llena de tradiciones en nuestra ciudad.